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Cocodrilario
Cocodrilario transcurre en un México fantástico poblado de bestias, criaturas mitológicas y mujeres que vagan sin rumbo entre espacios liminales embrujados por la memoria. Los nueve relatos que componen el libro exploran lugares de metamorfosis y trazan la órbita de un mundo nuevo, atosigado por la llegada de un misterioso cometa. Aquí habitan conjuros del desangrado, lechuzas, quetzales, yaguarundíes, gestaciones monstruosas, nudos de pelo, familiares de brujas, superstición, líos supernaturales y también maritales, sonambulismo, somniloquía, cráteres, promesas fulgurantes, la marcha de una marabunta monolítica que busca un nuevo lugar para reinventar la humanidad, y, por supuesto, docenas de cocodrilos.
Tornasol - ¡PRÓXIMO LANZAMIENTO!
En Tornasol, la infancia es el punto de partida para recuperar la capacidad de asombro. A través de estos nueve cuentos se plantea la posibilidad de maravillarse otra vez, de hallar consuelo, y por ello, los niños y las mujeres marcadas por la pérdida llevan la voz cantante.
Mudanzas a castillos de arena
En Mudanzas a castillos de arena los temporales abundan. Es un libro construido a partir de las inundaciones de una megalópolis, de los ríos ocultos que intentan volver a apoderarse de esta, y el repositorio de la esperanza de todos los habitantes de la ciudad. A través de él, rugen todos los legados depositados en una sola mujer, quien ha perdido un hermano e intenta hallar un lugar seguro para prosperar, apartado del agua brava. Una mujer que se atreve a desear.
Este libro es un trayecto por la crisis inmobiliaria —búsqueda perenne de encontrar un hogar en el contexto actual—, una invitación a aullar en la incertidumbre de la realidad, y una misiva de desesperanza dirigida a la Ciudad de México, que nació sobre un lago y al mismo ha de volver. Pero también es una invitación a actuar y a rebatir la tormenta.
Este libro es un trayecto por la crisis inmobiliaria —búsqueda perenne de encontrar un hogar en el contexto actual—, una invitación a aullar en la incertidumbre de la realidad, y una misiva de desesperanza dirigida a la Ciudad de México, que nació sobre un lago y al mismo ha de volver. Pero también es una invitación a actuar y a rebatir la tormenta.
Nuevas emergencias
En este nuevo volumen, diecisiete escritoras y escritores iberoamericanos, que tienen también en común el haberse formado en el Máster en Creación Literaria de la UPF-BSM, nos recuerdan que el género del relato sigue siendo tanto un archivo de formas clásicas como un laboratorio de nuevas variaciones. Con ecos de los grandes maestros americanos del siglo XX (de Borges a Foster Wallace, pasando por Carver o Alice Munro) y del XXI (como los profesores del programa Juan Villoro y Samanta Schweblin), en este libro encontramos textos que hablan de duelos antiguos y que investigan en las tecnologías de hoy, de realismo urbano y de fantasía gótica, con ficción y sin ella.
Pangea
"Fiel a la tradición familiar, mi mamá me puso Sídney, explicó dicha nieta, con la mirada fija en la taza de café del hospital. A ella le hacía gracia llamarse Australia. Yo, la verdad, no sé qué voy a hacer si tengo hijos. Buscaré nombres de barrios, supongo."
Pangea nos muestra cómo la última fractura de una familia puede, también, unirla.
Pangea nos muestra cómo la última fractura de una familia puede, también, unirla.
Cautivo de sombras
Desari era una soñadora lúcida experta, hasta que comenzó a traer de regreso cosas de sus sueños. Sueña con el mar e inunda su cuarto con peces koi de color neón, vuela sobre un campo de lavanda azul eléctrico y amanece con una ramita debajo de su almohada. Cosas imposibles.
Hasta que las cosas imposibles la alcanzan, y un par de elfos se le llevan a un mundo con dos lunas y una misión inevitable: ella debe rescatar a un elfo del que ni recuerda el nombre; pero quien la ha elegido para definir el rumbo de la guerra de Delaïtha, donde todo lo mágico huyó en éxodo de la Tierra, hace tres siglos.
Cuatro razas y cuatro coronas no verán con buenos ojos su llegada, pues ella es una nueva pieza en un juego de ajedrez incierto.
“Era un poco angustiante la facilidad con la que me adaptaba a estar con tres absolutos extraños de otra raza en un mundo desconocido, perseguida por un ejército de orígenes inciertos, volando además a lomos de una criatura que no existe y en la búsqueda de un hombre que era más sueño de que carne y hueso.
Incluso, considerando que traía un cofre con cosas que había sacado de mis sueños, y que era la única mujer con labios rojos en el planeta. Pero desentendiéndonos de todo aquello, lo demás me parecía bastante coherente.”
Hasta que las cosas imposibles la alcanzan, y un par de elfos se le llevan a un mundo con dos lunas y una misión inevitable: ella debe rescatar a un elfo del que ni recuerda el nombre; pero quien la ha elegido para definir el rumbo de la guerra de Delaïtha, donde todo lo mágico huyó en éxodo de la Tierra, hace tres siglos.
Cuatro razas y cuatro coronas no verán con buenos ojos su llegada, pues ella es una nueva pieza en un juego de ajedrez incierto.
“Era un poco angustiante la facilidad con la que me adaptaba a estar con tres absolutos extraños de otra raza en un mundo desconocido, perseguida por un ejército de orígenes inciertos, volando además a lomos de una criatura que no existe y en la búsqueda de un hombre que era más sueño de que carne y hueso.
Incluso, considerando que traía un cofre con cosas que había sacado de mis sueños, y que era la única mujer con labios rojos en el planeta. Pero desentendiéndonos de todo aquello, lo demás me parecía bastante coherente.”
Mujeres perversas
Mujeres perversas nos sugiere, ya desde su título, un doble juego: ¿quiénes son las perversas, las protagonistas de estos doce cuentos, o las autoras que los escribieron? Claro que la propuesta es en sí un juego de ironías donde se esconde el verdadero significado, lo que está ahí, latente y oculto en la perversidad. Algo que pareciera escapar a ellas (protagonistas y autoras), algo que las precede, algo que, me animaría a decir, las justifica.
-Agustina Caride.
-Agustina Caride.
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